Historia de Estambul – conocida antiguamente como Bizancio y luego Constantinopla, fue la capital del Imperio Bizantino y el Imperio Otomano.
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La historia de Estambul está llena de guerras, invasiones, asedios y conquistas. Si vas a viajar a Estambul conocer un poco de su historia podría serte de utilidad ya que durante tu viaje a Estambul podrás apreciar las diferentes influencias que coexisten en esta maravillosa ciudad.
Originalmente, se cree que la región fue habitada por tribus asiáticas que no dejaron mayores asentamientos, no es sino hasta la llegada de los griegos que comienza la fascinante historia de esta ciudad.
En el siglo séptimo antes de cristo, los colonos griegos de Megara liderados por el rey Byzas establecieron la colonia de Bizancio, en honor de su rey.
Una de las curiosidades de la historia de Estambul es la historia de cómo el rey Byzas eligió el lugar que hoy en día se conoce como Estambul es bastante increíble. El rey Byzas eligió el lugar después de consultar a un oráculo de Delfos que le dijo que se estableciera una ciudad frente a la “tierra de los ciegos”.
Byzas comenzó su búsqueda, y luego de llegar a Estambul concluyo que los pobladores anteriores debieron haber estado ciegos para haber pasado por alto esta magnífica ubicación en la desembocadura del estrecho del Bósforo.
Así, la fundación de Estambul resulto ser una decisión visionaria del rey Byzas, ya que la historia ha demostrado que la ubicación de Estambul es muy importante, incluso más importante de lo que estos primeros colonos griegos podrían haber concebido. De hecho, Estambul fue durante muchos siglos uno de los centros más importantes de poder político y económico del mundo.
Muchos siglos después, en el siglo 1 a. C. la ciudad paso a ser parte del imperio romano, como una ciudad libre asociada. Luego en el año 330 d. C, la ciudad fue conquistada por Constantino I, se convirtió en la nueva capital del imperio romano y fue renombrada Constantinopla.
En el año 395 d. C. el imperio romano se dividió, en dos imperios, el imperio romano occidental y el imperio romano oriental, conocido como Imperio Bizantino. La ciudad entonces entro en una época de esplendor, grandes obras como Santa Sofia se construyeron durante esta época.
Además, Constantinopla controlaba las rutas comerciales entre Asia y Europa, así como el paso del Mar Mediterráneo al Mar Negro. Por tal motivo, Constantinopla mantuvo una posición relevante durante siglos, convirtiéndose en una gran urbe europea durante la edad media, mientras que la parte occidental del Imperio Romano entró en una crisis económica, comercial, política y demográfica.
No es sino hasta, 1453 cuando la ciudad de Constantinopla, asediada por años, cayó bajo dominio turco, quienes ya habían conquistado el resto del Imperio Bizantino. Ese año Mahomet II, el primer sultán en regir la ciudad entraba a caballo en Santa Sofía, este evento cambio la historia de Estambul para siempre. Asimismo, la caída de Constantinopla impactó a la sociedad europea de tal manera que se considera el final de la Edad Media.
Los turcos otomanos dirigidos por el sultán Mehmet II cambiaron el nombre a la ciudad, la cual paso a llamarse, Estambul. En ese momento, se convirtió en la tercera y última capital del Imperio Otomano, además, fue el centro neurálgico de las campañas militares que ampliaron dramáticamente el Imperio Otomano.
Durante el Imperio Otomano la ciudad experimento un cambio cultural y religioso completo, y pasó de ser una ciudad bizantina y cristiano ortodoxa a otra otomana e islámica. Muchas iglesias, incluyendo a Santa Sofia, fueron convertidas en mezquitas, especialmente en aquellas zonas de la ciudad que se resistieron más a la invasión turca. Otras iglesias se conservaron y nuevas mezquitas se construyeron alrededor de la ciudad; de hecho, cada sultán construyo una magnífica mezquita para conmemorar su reinado.
A mediados del siglo 16, Estambul, tenía una población de casi medio millón de habitantes, era un importante centro cultural, político y comercial. El dominio otomano continuó expendiéndose hasta que fue derrotado en la Primera Guerra Mundial y Estambul fue ocupada por los aliados.
Luego, de la Primera Guerra Mundial la Revolución de los Jóvenes Turcos depuso al Sultán Abdul Hamid II y al Imperio se debilitó aún más, de modo que, en la Primera Guerra Mundial, la ciudad fue ocupada por los británicos, franceses e italianos. El último emperador otomano, Mehmed VI, fue exiliado en 1922 y poco después nació la nueva República de Turquía.
Cuando Mustafa Kemal Atatürk estableció la República de Turquía, el 29 de octubre de 1923, la capital fue trasladada de Estambul a Ankara. En los primeros años de la república, Estambul fue relegada en favor de la nueva capital Ankara, pero durante los años cincuenta y sesenta Estambul se sometió a un gran cambio estructural. Desde ese momento, la ciudad no ha dejado de crecer.
La ciudad de Estambul ha continuado expandiéndose dramáticamente, y hoy su población es de más de 15 millones y aumenta a un estimado de 700,000 inmigrantes por año. Esto la convierte en la ciudad más poblada de Turquía y tambien en la ciudad más poblada de toda Europa. Muchas industrias se han desarrollado, especialmente el turismo, que se ha convertido en un motor de la economía.
Desde sus inicios la historia de Estambul ha sido marcada por su posición geográfica privilegiada, hasta el sol de hoy Estambul sigue siendo el punto de encuentro entre Europa y medio oriente y Asia. Su prevalencia como una ciudad importante no ha disminuido, sino todo lo contrario, la ciudad es hoy en día una moderna megalópolis en el cual siglos de historia coexisten con la modernidad.
Cuando visites Estambul podrás ver que, Estambul tiene una esencia propia, es una ciudad que crea su propia historia en el punto de encuentro de los dos continentes. La fascinante historia de Estambul se encuentra impregnada en toda la ciudad, sus calles, sus iglesias, sus mezquitas, y su cultura, son el resultado de la confluencia de muchas culturas e imperios.