Que ver en Marrakech – Marruecos es un país lleno de días cálidos y abundantes fragancias, y Marrakech, una de sus ciudades principales, no podía dejar de ser igual. Sin duda esta ciudad es fascinante, donde encontrarás una combinación de antigüedad y modernidad que dejarán boquiabierto incluso al más exigente de los visitantes.
Podrás pensar que esta ciudad de Marruecos está llena solo de laberintos, encantadores de serpientes y callejones, perotambién notarás que tiene una cara muy moderna que en combinación con su cultura tradicional es la mezcla perfecta para la exploración.
A pesar de que el turismo está comenzado a tener auge en la ciudad hay muchas cosas que ver en Marrakech, donde podrás conocer sus encantos y enamorarte de la magia de “The Red City”.
Con esta pequeña guía de qué ver en Marrakech te presentamos todos los lugares que no puedes dejar de visitar en la ciudad, desde restaurantes hasta la medina, lugares subterráneos y museos, todo para que tu estancia aquí sea espectacular. ¡Acompáñanos!
Justo en el corazón de la Medina encontramos unos de los lugares que ver en Marrakech, la gran plaza abierta de Jemma el-Fna, que es además patrimonio mundial de la Unesco. Allí quedarás impresionado con el entusiasmo de los artistas callejeros y de los “henna” del país, también verás a los encantadores de serpiente como algo muy común, pero que para ti será increíble.
Las noches es el mejor momento para visitar Jemma, donde podrás probar la comida callejera mientras escuchas música. Los bares en las azoteas son ideales para ver la puesta de sol. Además el halqa o teatro callejero siempre tiene una puesta en escena para entretenerte.
El diseñador francés Yves Saint Laurent le encantaba estar en Marrakech, tanto que compró el Jarin Majorelle. El cual decidió convertir en museo, inaugurándolo junto al jardín con una exhibición permanente de las prendas de sus 40 años de carrera.
¿Por qué ver en Marrakech este museo? Porque aunque no seas fashonista o diseñador, el trabajo de este señor es digno de admirar, además el museo en sí mismo es un lugar espectacular con un hermoso café para pasar el rato y una librería, además de la sala de exposiciones temporales.
Los amantes del arte y la moda tendrán un nuevo sitio favorito en este lugar.
El Jardin Majorelle fue creado por el pintor francés Jaques Majorelle. Es uno de los lugares que ver en Marrakech pues este sin duda es impresionante, la casa de art déco azul es la pieza central del cuadro y los diferentes tipos de cactus que adornan el jardín son el contraste perfecto de la escena.
Los llamativos colores de este lugar lo vuelve uno de los favoritos para las fotos de Instagram, de hecho, se cree que es casi imposible tomar una mala foto en este sitio.
Abu ‘Bou’ Ahmed fue un esclavo que se convertiría en un asesor político de los monarcas o visir, quien al cambiar su estatus compró este palacio de 150 habitaciones, donde no escatimó en gastar para la hermosa decoración que verás hasta la actualidad.
Desde techos pintados con dorados y azulejos policromados, hasta tallados y alfombras bordadas coloridas, no dejarás de decir un “wow” al visitar este lugar. “Bahía” es un término que se traduce más o menos como la palabra “hermoso”, y al ver el palacio notarás que esto no es exagerar pues su belleza está en los detalles y colores bien armados.
Conocido como el “Andy Warhol de Marrakech” el artista Hassan Hajjaj creó su galería para trabajar en sus obras de arte. Esta no solo era el sitio de trabajo de Hassan sino también su hogar. Podrás apreciar cómo el arte pop impregna el lugar, pues desde sus muebles hasta sus fotos todo es arte.
Este sitio es también un salón de té, donde te sentirás como un invitado de honor al apreciar el arte a tu alrededor mientras disfrutas de un refrescante té de menta.
Los zocos son considerados mercadillos o lugares al aire libre donde podrás comprar y participar en diferentes actividades, estos son muy comunes en los países aranes y entre los sitios que ver en Marrakech tenemos unos cuantos que no te puedes perder.
Si ya probaste la gastronomía marroquí sabrás que esta está llena de sabores aromáticos y deliciosos y ¿dónde conseguir las especias para que tu comida sepa así? Pues en el zoco de las especias más famosas de Marrakech.
Encontrarás de todo, la famosa pimienta de Jamaica, la mezcla de doce especias para curry y sal rosa. Es un lugar al aire libre donde podrás obtener especias de cada cesta colorida llena de mucho sabor.
El más grande de todos los zocos es Souk Semmarine, un laberinto de productos dignos de una búsqueda del tesoro. Desde alfombras, artículos de cuero, cubiertos y vajillas encontrarás aquí, trata de no perderte entre tanto movimiento y objetos.
Souk Cuisine es un sitio al aire libre que organiza clases de cocina marroquí, comienzas dando una vuelta por los zocos para comprar los ingredientes del platillo del día y luego vas con las mujeres marroquíes que te enseñarán a preparar el plato.
La comida forma parte intrínseca de cada cultura, y la marroquí no podía ser distinta, además que en el curso aprenderás no solo de comida sino de tradiciones del país, lo que hará de esta experiencia una de las más memorables del viaje.
El actual museo Des Confluences resguarda la colección arqueológica de las culturas orientales y occidentales de American Patty Birch. Este antiguo palacio fue el hogar de Thami El Glaoui, conocido también como el señor del Atlas.
Esta construcción, como todas las de la ciudad, en sí misma es hermosa por la cantidad de detalles que tiene, pero también la exhibición de los hallazgos arqueológicos la convierten en una parada obligatoria al viajar a la ciudad.
Si quieres conocer cómo ha sido el paso del tiempo de la ciudad de Marrakech debes ir a la Maison de la Photographie. Aquí se exponen las imágenes que documentan el estilo de vida de Marrakeh entre 1870 y 1950, trabajo de Menac’h y Marrakshi Hamid Mergani.
Notarás que a pesar de haber pasado tanto tiempo, hay calles y costumbres que permanecen iguales a las fotos, podrás aquí conocer la historia visual de Marruecos y tomarte un café en la azotea donde tendrás una vista espectacular de la medina.
Los baños públicos son populares en Marruecos y en Marrakech verás uno casi que en cada vecindario. Aquí es donde lo lugareños vienen semanalmente a relajarse y exfoliar su piel, además de reunirse con amigos y familiares. Quizás te parezca extraño pero es parte de su cultura.
Tomar un baño en este hamman te la oportunidad de vivir una experiencia totalmente distinta, además de tomar tratamientos para la piel como mascarillas, masajes, exfoliantes, etc., en un entorno súper lujoso mientras conectas contigo mismo.
Otra de las experiencias únicas de la ciudad es darse una vuelta al atelier de los maestros artesanos. Donde podrás hacer tus propios productos como zapatillas o cursos de cerámica, yeso, cestería, etc., y a la vez escuchar interesantes historias de los artesanos que llevan años en sus oficios.
Esto te ayuda a entender y ver con una nueva perspectiva el trabajo y apreciar los bienes que obtienes en los zocos y en general en la vida.
El barrio judío de Marrakech puede ser un de las experiencias más extraordinarias de la ciudad o incluso de Marruecos, pues es un país donde la religión predominante es la musulmana, ver sinagogas como la de Al Azama o el cementerio de Miara puede ser realmente impresionante.
En contraste con el resto de la ciudad este barrio puede parecer muy tranquilo y sobrio, pero a la vez con un aire religioso impregnado por todo el lugar, una caminata por allí valdrá la pena.
Conocido como “Ciudad Nueva” es el barrio al oeste de la medina. Es uno de los más modernos de la ciudad y en definitiva otro de los sitios qué ver en Marrakech. Hay boutiques y centros comerciales de estilo europeo, donde encontrarás todo lo que necesites al igual que en tu ciudad.
Además, los mejores restaurantes de la ciudad están aquí, y la variedad de bares te dará la oportunidad de relajarte y cambiar de ambiente un rato.
Esta joya de arquitectura saadiana data del silgo XVI y fue construida para una familia noble, pero ¿por qué está en la lista de qué ver en Marrakech? Porque se ha conservado toda la decoración original, que además sirve de fondo para eventos musicales y exposiciones artísticas.
Es un museo que ofrece conciertos de música clásica marroquí, solo abierto de octubre a mayo, pero que te da la oportunidad de vivir la cultura del país de una manera más íntima.
Como ves hay mucho qué ver en Marrakech y esto que te contamos es solo la punta del iceberg, todavía queda mucho más para explorar y conocer en esta increíble ciudad de Marruecos.